Adiestramiento canino: ¿cómo integrar a los perros en la vida humana?
Después de muchos meses de espera, finalmente ha llegado el momento de recibir a tu nuevo compañero en casa. Como un nuevo integrante de la familia, queremos darle todo: cuidados para su pelo, vacunas, veterinario, correa, juguetes y sí, mucho amor y cariño. La gran pregunta es: ¿por dónde comenzamos?
Como educadora canina profesional y Auxiliar Técnico Veterinaria, creo en la jerarquización de la relación perro-dueño. Sin embargo, no podemos dejar de lado que, antes de cualquier cosa, tenemos que ser amigos en todo momento.
El perrito viene de estar rodeado de todos sus hermanitos y, de repente, se encuentra solo y rodeado de personas extrañas, por lo que, lo primero que le tenemos que transmitir es el calor de nuestra casa y nuestra intención de brindarles protección.
¿Qué hacer desde el primer momento?
Dejar las normas claras desde el inicio es fundamental. Tenemos que pedir respeto y establecer los límites que queremos marcarle en su relación con el mundo, cosa que varía depende del estilo de vida que llevemos.
Es importante que todos los miembros de la familia tengan la misma visión y que trabajen juntos por lograr el mismo objetivo. De esta manera, le evitaremos al perro confusión y frustración, dos sensaciones que pueden derivar en conductas no deseadas y en problemas en el hogar.
Eso sí, debemos tener muy claro que a los cachorros nunca les exigiremos más allá de lo que saben. Como seres humanos estamos en la capacidad de entender que, recién llegados a nuestra casa, es poco a nada lo que hayan aprendido ellos por su cuenta de la relación con los demás perritos de la camada.
Los perros aprenden bajo la asociación positiva o negativa de las acciones que llevan a cabo, siendo negativo el hecho incluso de no llegar al resultado que ellos buscan. Ellos tienen dentro un pensamiento: la acción y su respuesta o resultado. Por ejemplo, si cuando quiere algo ladra y le funciona, cada vez ladraré más para conseguirlo porque lo reconoce como un mecanismo para lograr su objetivo.
¿Premiar o no?
¡Qué buen chico! Premiar a nuestro peludo es muy aconsejable. Debemos premiar toda conducta que queramos que se repita en un futuro para elevar su probabilidad de aparición con las famosas chuches, golosinas o premios. Si nuestro perrito no es muy tragón nos valdrá cualquier cosa que sea de su propio agrado, incluso pudiendo ser un juguete o una caricia.
Cuando queramos premiar una conducta o acción muy determinada tendremos que usar golosinas pequeñas que no tarden mucho en masticar para poder recompensar el momento exacto, a diferencia de las golosinas duras o galletas con las que se pueden quedar un buen rato entretenidos.
La socialización con su entorno desde los primeros meses
Otra cosa importante desde bien cachorros es la correcta socialización con personas, con otros perros y con el entorno exterior. Al tener que esperar a cumplir un buen calendario de vacunación para que puedan salir a la calle esta etapa muchas veces se retrasa. Ten en cuenta que la socialización, idealmente, hay que llevarla a cabo entre los 2 a los 4 meses de edad.
Siempre podremos juntarles con perros que sepamos que están sanos, vacunados y desparasitados al día. En relación al entorno, sus primeras salidas pueden ser con nosotros en brazos o llevándolos en una mochila para que se vayan habituando a los ruidos de la calle.
Si vivimos en una ciudad es mucho más importante, ya que, de la tranquilidad de estar en casa a la salida a la calle entre ruidos de coches, autobuses, ambulancias, es mucho más chocante para el que va a crecer en entornos más rurales.
Y, ¿qué hay de los castigos?
Me gusta que mis clientes sean capaces de grabarse una cosa en el coco: no todo es castigar las conductas indeseadas, sino que hay que premiar las buenas. No vale de nada el castigo si nunca hay un refuerzo positivo a su lado.
También en este proceso de conocerse mutuamente tenemos que aprender a leer a nuestro perrito: ¿por qué bosteza? ¿Por qué se lame el hocico? ¿Por qué se estira? ¿Por qué se sacude?
¡Eso os lo contaremos en la siguiente publicación amigos lectores! De momento tratad de haceros total y absolutamente su amigo, su mano derecha y su compañero en el que siempre poder confiar.